Statement

Estoy buscando un lugar, cuando lo encuentre voy a buscar otro.

Mi pintura, como todo en mi, es de naturaleza cambiante.

En especial el color. Me esfuerzo por lograr una serie, una continuidad. Pero encuentro un color nuevo y eso me distrae hacia otro camino. Necesito saber a donde me va a llevar.

Encontrar un color nuevo es igual o más emocionante que encontrar un lugar nuevo. ¿El color es un lugar entonces?  o ¿Es un medio? 

Me gusta llegar a paraísos aún no descubiertos, ahí donde debería pedir permiso para entrar. Lugares a donde no podemos ir en cualquier estado, ni ver en cualquier momento. 

Principio selvático.

¿A ver que hay detrás de estas hojas? ¿a ver que hay detrás de este amarillo? Es como si mi pintura fuera un viaje interminable. Una pintura me va a llevar a otra. Los lugares serán cada vez  más recónditos. Los colores también. Voy buscando lugares más salvajes (¿ya viven en mi?)

No sé cuanta elección tengo yo en todo esto. Llego a un lugar nuevo que realmente me gusta, que siento propio (de color, de forma, de abstracción), y se vuelve un punto de partida para encaminarme hacia otro lugar, porque la opcion de quedarme no existe. Es como si mi entusiasmo exagerado con la promesa de lo desconocido es el único que decide.

Algo que me interesa mucho de la pintura es como una vez que me meto a pintar, pierdo noción, decisión, me sumerjo en un mundo del cual no soy plenamente consciente, y cuando paro de pintar, me alejo y miro la pintura, descubro un poco que pasó.

Lo continuo está en terminar y empezar de nuevo.

Por eso mi obra, o todo lo que hago, cambia de sentido todo el tiempo. Lo que ahora es nuevo, sin descubrir, en un tiempo me parecerá un terreno demasiado caminado. Solo será cuestión de buscar otro nuevo lugar.